Los Corrientes de Costa Rica
Afuera la costa de Costa Rica, entre la península bote grande y la península bote pequeño… Estos son mis nombres. La península bote grande es lo que forma el Golfo de Nicoya, con Cabo Blanco. La península bote pequeño es lo que forma el Golfo Dulce, con Cabo Matapalo.
Entre los dos hay una bahía larga, de cien millas náuticas, que necesitaba dos días atravesar. Atravesando allí, con vientos suaves, a veces ausentes, el mar presenta un fenómeno insólito.
Hay zonas acá con corrientes fuertes. Fuerte significa un nudo y media o más. A veces, Brisa mueva solo con un nudo y media. Un día allí, estábamos parados por el corriente. Navegué con respeto al mar. No me moví con respeto a la tierra.
Aunque los corrientes mueven lentamente, hacen una marca definitiva sobre la superficie. Mirándolo, parece que hay viento, una zona marcaba por una ráfaga. Adentro la cabina, sonaba como el velero aceleraba. Pero no. No había cambio ninguno con el viento. Solo la superficie del mar salía rugoso, salpicando, a veces con ovejas.
Las zonas vienen y pasan por un periodo de unos minutos. Puede imaginar que el corriente viaja con ondas. Las topes de las ondas tocan a la superficie y lo perturbaban. En los vídeos puede oír las velas flameando. Hay viento poco. En algunos las velas son bajos. Brisa está a la deriva.