Las fragatas magníficas son planeadores. Conocido en México como “tijera de mar,” son aves que siempre están volando. Una fragata magnífica casi nunca aterriza y nunca se moja. Si se moja, no podría volar y moriría. Por eso, no pueden descansar sobre el mar como las demás aves marinos. La ironía de este situación es que las fragatas magníficas se alimentan de peces.
Son aviadores muy eficientes. Cuando están volando, casi nunca baten sus alas. Sus cuerpos son muy ligeros, incluso para un ave, y sus alas largas. No necesitan doblar sus alas para aterrizar, por eso las alas pueden medir más del doble que sus cuerpos.
Supongo que no tienen pies. Nunca los vi, además, si no los utilizan serían un peso inútil. Cierto es que necesitan aterrizar para reproducirse e incubar sus huevos. Me imagino que pueden aterrizar sin pies. No pueden caminar. Aterrizan sobre sus nidos.
Es una broma porque siempre les visto volando. La verdad es que sí, por supesto, tienen piernas cortas con pies. Les he visto aterizando y parado sobre unos picos rocoso abajo el acantilado de Punta Púlpito. Fue una vista bien raro.
Como planeadores, cuando no cazan, siempre buscan corrientes del aire que van hacia arriba. Una señal segura de una columna del aire ascendente es ver un grupo de fragatas magníficas que circulan juntas. Son maestras en volar deslizándose por las corrientes ascendentes. Es esencial que, como aves que permanecen siempre volando, su vuelo sea eficiente, ya que son voladores perezosas.
Para pescar, una fragata magnífica baja sobre el agua y asusta al pez cerca de la superficie. Cuando el pez salta, la fragata magnífica lo agarra con su pico. También, cuando hay un banco de peces que saltan, a veces las fragatas magníficas los ven y van a casarlos.
Cuando cazan son ágiles conductoras. Se zambullen y giran como las golondrinas. Pueden cambiar el rumbo de un instante a otro, descender de repente, y ascender rápidamente. Tienen las colas en forma de fragatas magníficas como las golondrinas y las utilizan de manera muy parecida. Cuando pescan cerca de la superficie son como golondrinas gigantes.
Otro modo de alimentarse consiste en hostigar a otro ave que tiene un pez en el pico o recién lo engulló. Como son más ágiles, molestan a la otra para que suelte o vomite el pez. Se alimentan de peces y no pueden bucear ni poner una pluma en el agua. Por eso necesitan ser oportunistas.
Antes de ver las fragatas magníficas, nunca imaginé un ave que no aterriza casi nunca. Sin embargo, el caso es que existen. Son aviadores puras, aves de verdad, las fragatas magníficas.